Fernando Ortiz-H, Gerente de Desarrollo de Negocios para Iberoamérica, Genesus Genetics Inc

El mercado mexicano de la carne de cerdo se ha ido recuperando paulatinamente de los bajos precios de principios de año. En el último mes y medio, ha logrado elevar los precios en alrededor de 15 ¢ US por libra de peso vivo (de 65 ¢ / lb a 80 ¢ / lb) en los últimos dos meses.

Desafortunadamente, no todo ha sido una buena noticia, ya que los precios de los granos, la mayoría de los cuales son importados, han subido un 50% en costo, impactando significativamente los costos de producción porcina. Si el tipo de cambio entre el peso mexicano y el dólar estadounidense se mantiene estable como hasta ahora, alrededor de 20 pesos mexicanos por dólar, todavía es rentable producir con los altos costos de las materias primas alimentarias.

La situación se volvería más dramática si el peso mexicano sufriera una devaluación, lo cual no es extraño, especialmente en momentos de alta volatilidad como los actuales.

Se cree que el reciente aumento en los precios de la carne de cerdo se debe más a la estacionalidad que a cualquier otro efecto. Es normal que al finalizar la Semana Santa y las fiestas de Semana Santa el consumo de carnes rojas vuelva a su curso normal. Sin embargo, lo ocurrido en el último año ha sido muy atípico debido a la pandemia de Covid-19.

El consumo de carne de cerdo se ha visto muy afectado ya que una gran parte de la población ha perdido sus ingresos. La actividad de las industrias turística y de restauración en el país se ha visto deprimida por las constantes restricciones ordenadas por los gobiernos estatales y federales para mitigar la propagación de la enfermedad entre la población.

Con más de 2 millones de casos y más de 200,000 muertes por Covid-19, el país se ha visto muy afectado. A la fecha, aproximadamente el 1% de los 130 millones de habitantes que conforman la población mexicana se encuentran totalmente inmunizados.

También se cree que otros factores externos han contribuido a la recuperación de los precios del cerdo vivo, y estos son principalmente un aumento de las exportaciones a China, que muestra una mayor demanda. Así como el aumento de enfermedades porcinas en Estados Unidos como PRRS y PED.

Las expansiones previstas en 2019 aún están pendientes, a la espera de una mayor estabilización del mercado. Incluso hemos escuchado de algunos productores y empacadores que quieren vender sus activos, tanto granjas como instalaciones de procesamiento de carne. Normalmente, no vende los activos de su empresa cuando las cosas van muy bien.

Entre los productores porcinos diríamos que hay resiliencia y optimismo enterrado, esperando un segundo semestre más claro y atractivo.

Compartir este...
Compartir en LinkedIn
LinkedIn
Compartir en Facebook
Facebook
Comentar esta noticia en Twitter
Twitter

Categorizado en: ,

Este post fue escrito por Genesus